Actualmente, las personas diabéticas deben realizarse una punción en la piel para practicar un examen de sangre, determinar el nivel de glucosa y controlar su enfermedad. Sin embargo, una revolución médica de la Universidad de Bath, en Reino Unido, ha creado un parche adhesivo no invasivo, que promete la medición de los niveles de glucosa a través de la piel sin perforarla.
FUNCIONAMIENTO
El parche no perfora la piel, sino que extrae la glucosa del líquido que se encuentra entre las células a través de los folículos capilares, a los que se accede individualmente a través de una serie de sensores con grafeno en miniatura que utilizan una pequeña corriente eléctrica. La glucosa se acumula en pequeños depósitos y se mide. El parche se aplica a alguna parte del cuerpo, por ejemplo la muñeca.
Este método permite controlar los niveles de glucosa durante seis horas con intervalos de 10-15 minutos, según los científicos responsables de la investigación.
Fundamentalmente, debido al diseño de la matriz de sensores y reservorios, el parche no requiere calibración con una muestra de sangre, lo que significa que los análisis de sangre con pinchazo de dedo son innecesarios.
PRÓXIMOS PASOS
Habiendo establecido pruebas del concepto detrás del dispositivo en un estudio publicado en Nature Nanotechnology, el equipo de investigación de la Universidad de Bath espera que eventualmente se convierta en un sensor portátil de bajo costo que envíe mediciones de glucosa periódicas y clínicamente relevantes al teléfono o dispositivo del usuario de forma inalámbrica, permitiéndole la visualización de los resultados y alertándole cuando es posible que deba tomar medidas.
En este estudio, el equipo probó el parche en pieles de cerdo, donde mostraron que podía rastrear con precisión los niveles de glucosa en el rango de pacientes humanos diabéticos y en voluntarios humanos sanos, donde nuevamente el parche podía rastrear las variaciones de azúcar en sangre a través del día. Hasta ahora no se han detectado contraindicaciones.
Los próximos pasos incluyen un mayor refinamiento del diseño del parche para optimizar la cantidad de sensores en el conjunto, para demostrar la funcionalidad completa durante un período de uso de 24 horas y para llevar a cabo una serie de ensayos clínicos clave.
CONCLUSIÓN
La diabetes es un grave problema de salud pública que está aumentando. La Organización Mundial de la Salud pronostica que la incidencia mundial de diabetes aumentará de 171 millones en 2000 a 366 millones en 2030.
Una manera efectiva y no invasiva de monitorear la glucosa en sangre podría ayudar tanto a los diabéticos como a aquellos en riesgo de desarrollar diabetes, a tomar las decisiones correctas para controlar bien la enfermedad o reducir el riesgo de desarrollarla.
En países europeos como España, Dinamarca, Polonia, Holanda y Francia, y en algunos asiáticos como China, la bicicleta es un medio de transporte muy común entre sus habitantes. Esta tendencia crece cada día en el mundo entero y tiene muchas ventajas, como beneficios para la salud tanto física como emocional, el cuidado del ambiente y la economía familiar.
Pero ¿cómo hacer esta actividad cuando las condiciones climáticas son extremas? Aquí es cuando surge PodRide, una bicicleta con la cual se puede pedalear en cualquier lugar, en los climas más extremos, viajar con comodidad y seguridad, además de las ventajas antes mencionadas.
Mikael Kjellman, es un ingeniero de diseño suizo apasionado por las bicicletas, que tuvo la idea de la PodRide por su deseo de andar en bicicleta por el frío de Suecia (donde vive actualmente) y la necesidad de un vehículo que lo protegiera de las inclemencias del clima.
Así pues, desarrolló este prototipo parecido a un “mini-vehículo”, pero en realidad es una bicicleta con una “carcasa” para la protección del viento, la lluvia y hasta la nieve. El diseño también difiere de un automóvil por la pequeña anchura y longitud, aunque tiene cuatro ruedas.
Mikael usó el prototipo para ir a trabajar todos los días durante un año y demostró que es un mini-vehículo muy práctico y cómodo.
CARACTERÍSTICAS
MUY PRÁCTICA. Es completamente resistente a la intemperie, por lo que se puede viajar en cualquier clima. Además, cuenta con capacidad de carga para las compras y permite el acoplamiento de un remolque de bicicleta para el transporte de otras personas.
VERSÁTIL. Puede manejarse en caminos estándar, pavimentados o de tierra. Las ruedas son lo suficientemente angostas para circular en carriles para bicicletas, pero con estabilidad en las curvas.
ASISTIDA ELÉCTRICAMENTE. El motor eléctrico de PodRide le permite ajustar el nivel de asistencia, viajar más lejos, facilitar y conquistar las colinas. Alcanza una velocidad de hasta 25 km por hora, pero la velocidad puede ser mayor si el usuario prefiere pedalear.
CONFORT INCORPORADO. Además de la protección contra la intemperie, el asiento es totalmente acolchado y con respaldo en la misma posición y altura de un vehículo pequeño, lo que facilita la visibilidad del tráfico.
SEGURA Y ROBUSTA. La visibilidad es un aspecto clave de seguridad cuando se circula en bicicleta. También tiene 4 ruedas por lo que es muy estable. El vehículo, que mide 1,80 metros y pesa 70 Kg, tiene también un cuerpo de protección externo para mantener el interior seco y caliente, según las necesidades de los diferentes climas. Incorpora un parabrisas con limpiaparabrisas.
Fuente: PodRide
Según el diseñador, ser verde nunca ha sido tan fácil. Usar la bicicleta estándar o el PodRide ayuda a reducir nuestra huella de carbono y hacer del mundo un lugar mejor. Ya el clima no es una excusa para practicar este deporte o usar este medio de transporte. Por otra parte, no requiere de tecnología avanzada y el costo de producción no es alto si se produce a gran escala.
La gran batería Hornsdale Power Reserve (HPR) de Tesla, también conocida como “la batería más grande del mundo" en Australia del Sur continúa captando la atención de analistas de energía, legisladores, operadores del mercado e inversores, y está generando un gran ahorro económico para Australia.
Renew Economy estima que la batería ahorró 5,7 millones de dólares en su segundo trimestre de funcionamiento, basándose sólo en los 30 megavatios (MW) de capacidad que está comercializando, con un margen bruto de 8,9 millones de dólares. Incluido en esto están los 3,2 millones USD ahorrados en su primer trimestre de operación según lo estimado por Renew Economy, proporcionando un buen historial de ahorro.
Los ahorros se estimaron usando el mismo análisis que el Operador del Mercado Energético Australiano (AEMO) utilizó en el primer trimestre, pero con unas pequeñas variaciones que resultaron de una estimación más alta para el Control de Frecuencia y Servicios Auxiliares.
Suponiendo que se repita esto en el segundo semestre de este año, se podría decir que HPR tendrá una recaudación bruta de alrededor de 18 millones USD por año calendario. Esto seguramente es muy satisfactorio para sus inversores, por solo 30 MW de su capacidad de 100 MW, es decir, sólo el 30% de la capacidad de 100 MW del sistema se está utilizando comercialmente.
El análisis detallado de las tendencias de carga y descarga de la batería revela que la batería se está volviendo más inteligente a medida que la red evoluciona hacia la nueva realidad, el tener un sistema de almacenamiento de un tamaño considerable. En el primer trimestre, la batería funcionaba como era de esperar: se cargaba por el día y se descargaba por la noche, cuando la producción solar comienza a disminuir drásticamente.
En el segundo trimestre, los patrones comenzaron a cambiar. El HPR todavía se descarga principalmente por la noche, pero se ha añadido un período de descarga matutino que supuestamente absorbe el pico de uso de la red eléctrica en las tareas matutinas, antes de que la producción solar pueda suministrar suficiente energía.
Los precios de la energía están cambiando como resultado de la nueva instalación, con un precio de venta promedio ponderado durante los primeros 6 meses de operación del sistema de $191/MWh. Esto se debió en gran medida a los precios extremadamente altos de enero, que, una vez eliminados, muestran un precio de venta medio ponderado de $141/MWh. En contraste, el sistema compró energía a un precio promedio de $79/MWh.
Estos precios demuestran lo inflexibles que son las redes tradicionales y la generación de energía, y da un gran resultado para los pioneros en baterías a escala de red. La necesidad de almacenamiento en la red será aún mayor a medida que se añadan más y más energías renovables, con una generación intermitente que haga cada vez más valiosa la capacidad de almacenar energía eólica fuera de las horas punta.
La batería HPR tiene actualmente el título fugaz de la batería más grande del mundo, con 129 MWh, aunque vistos los resultados que está dando, seguramente será un título que perderá en no mucho tiempo, ya que las empresas de servicios públicos recurren cada vez más a las instalaciones de almacenamiento estacionarias para sustituir a las plantas de gas natural o de carbón más antiguas.
Antes de la existencia del refrigerador, el poder mantener los alimentos en buen estado era un trabajo muy costoso. Se salaba la comida, y en invierno, podía enterrarse bajo mucha nieve con la esperanza de que los animales no la encontraran.
El refrigerador es uno de los inventos que más ha cambiado nuestro estilo de vida. Podemos mantener la comida más fácilmente, por lo que tenemos muchas menos cosas por las que preocuparnos. Por ejemplo, un cartón de leche puede durar un par de semanas en la nevera mientras que un par de horas fuera de ella. Eso significó que no era necesario tener una vaca en el patio trasero si se quería tener un abastecimiento regular de leche.
Un producto especial llamado refrigerante funciona en el refrigerador atrapado dentro de una serie de bobinas. Así realiza un circuito a través de su interior, cambiando de líquido a gas constantemente.
Pero resulta que estos refrigerantes son tóxicos y/o dañinos para el ambiente, en especial la capa de ozono. El gas de amoniaco, el propano, el freón o los CFCs (clorofluorocarbonos), desarrollados originalmente por Du Pont en el año 1930 como un gas no tóxico que reemplaza el amoniaco, se encuentran entre los refrigerantes más usados. Los CFCs son derivados del metano y debido a su contenido en cloro es altamente nocivo para la capa de ozono. Por ello, en 1987 muchos países se reunieron en Montreal y redactaron un protocolo para la sustitución escalonada de estos productos frigoríficos por otros más ecológicos. En el Protocolo de Montreal se estableció como fecha para la desaparición de los CFC el 1 de enero de 1996 y para los HCFC el 1 de enero de 2030, posteriormente acercada al 2014 y en Europa acordada para el 2004.
Sin embargo, el problema derivado del uso de estos halocarbonos es que estos compuestos una vez liberados en la atmósfera tienen un tiempo de permanencia que varía de 300 a 1.000 años.
Ante esta situación, algunos fabricantes han tratado de mejorar la tecnología existente para reducir el peligro de los gases emanados. Sin embargo, una tecnología revolucionaria de refrigeradores termoeléctricos, fabricada por Phononic Inc. en los EEUU y dirigida por Tony Atti, los elimina de la ecuación, resultando en un mejor refrigerador y en una manera eficaz y eficiente de luchar contra el calentamiento global.
FUNCIONAMIENTO DE LOS REFRIGERADORES TERMOELÉCTRICOS
Para entender su funcionamiento, hay que entender primero cómo funciona un refrigerador convencional.
La nevera convencional aprovecha un hecho físico: cuando un líquido se evapora, absorbe el calor. Es por eso que sudar enfría. El sudor absorbe el calor del cuerpo a medida que se evapora y se convierte en vapor de agua. Por el contrario, cuando el vapor de agua se condensa, libera calor. Los refrigeradores aprovechan este fenómeno para enfriar los alimentos.
El refrigerante líquido fluye a través de lo que se conoce como serpentines del evaporador dentro del refrigerador, absorbiendo el calor a lo largo del camino. Cuando el refrigerante se calienta, se convierte en gas. El gas caliente fluye a través de los serpentines del condensador fuera de la nevera, donde libera calor y vuelve a convertirse en líquido. El compresor aumenta la presión del refrigerante, elevando así su temperatura. Como resultado, la temperatura del refrigerante es significativamente más alta que la temperatura de la habitación y se enfría rápidamente.
Todo el sistema sirve para recoger el calor del interior de la nevera y liberarlo al exterior. Es por eso que los serpentines de la parte posterior de la nevera están tan calientes – están liberando el calor capturado en su interior. Aunque esta tecnología básica ha funcionado durante aproximadamente un siglo, tiene algunas deficiencias. El compresor consume mucha energía, hace mucho ruido y ocupa mucho espacio. Y, como se mencionó anteriormente, el refrigerante más común es un gas de efecto invernadero extremadamente potente.
Phononic elimina todo eso. Estos refrigeradores consumen menos energía, ocupan menos espacio, son silenciosos y presentan menos riesgos ambientales que los refrigeradores convencionales.
Fuente: Phononic
¿Cómo? Los semiconductores han transformado los datos, las comunicaciones, la energía solar y la iluminación LED. Ahora están interrumpiendo la refrigeración. Su enfoque del enfriamiento de estado sólido rompe los límites de la tecnología de semiconductores para desplazar las tecnologías anticuadas como compresores y ventiladores que no han sido cuestionadas durante más de 100 años.
Phononic utiliza un chip para enfriar un frigorífico aprovechando el efecto termoeléctrico, por el que una corriente eléctrica puede producir una diferencia de temperatura. Al pasar una corriente a través de un refrigerador termoeléctrico, el dispositivo absorberá el calor de un lado a otro.
Phononic está usando esta tecnología de diversas maneras: refrigeración electrónica, refrigeración de vino, refrigeración de medicamentos y vacunas en hospitales, entre otras aplicaciones. Pronto, la tecnología podría desplegarse en la refrigeración de alimentos.
PREMIOS
El mundo está en camino a un cambio climático peligroso y la refrigeración termoeléctrica es una solución que ha demostrado ser más eficiente, sostenible y rentable. De hecho, Phononic fue reconocida como una de las 100 empresas Global Cleantech en 2015 y 2016 para la entrega de soluciones de refrigeración y calefacción sostenibles y logró en 2017 la certificación ENERGY STAR, que es un programa voluntario de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) que ayuda a identificar y promover la eficiencia energética en productos, hogares y edificios en todo Estados Unidos.
LifeStraw es un dispositivo parecido a un sorbete (pajilla, paja, pitillo) que filtra el agua para hacerla potable, eliminando entre otros las bacterias, parásitos y protozoarios del agua instantáneamente.
Dependiendo de dónde provenga el agua, los contaminantes exclusivos de esa área pueden hacer que no sea seguro beberla. Las bacterias y los parásitos son los patógenos más comunes en ríos, arroyos y áreas rurales. El agua del grifo también puede contener sustancias químicas y niveles nocivos de metales pesados como el plomo.
Este producto es desarrollado por la empresa suiza Vestergaard Frandsen y fue diseñado para personas en países en vías de desarrollo que no tienen acceso a agua potable y para escenarios de emergencia luego de desastres naturales cuando los cuerpos de agua están contaminados. Pero es ideal también para para ir de excursión, acampar, viajar y prepararse para una emergencia. El diseño del filtro tipo sorbete le permite convertir hasta 4.000 litros de agua contaminada en agua potable (suficiente para el consumo de una persona durante tres años).
CARACTERÍSTICAS
LifeStraw es un filtro ultraligero (57 gramos), portátil ya que mide 22,5 cm de largo por 2,5 cm de diámetro, no requiere energía eléctrica ni baterías ni piezas de repuesto, no contiene productos químicos por lo que no deja un mal sabor en la boca, además cumple con los estándares de agua potable de la Agencia de Protección del Medio Ambiente (en inglés, Environmental Protection Agency, EPA) de EE.UU. y las materias primas cumplen con los reglamentos y normas de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE.UU.
Fuente: LifeStraw
Elimina el 99.9999% de las bacterias transmitidas por el agua, incluidas E. coli y salmonella y el 99.9% de los parásitos - protozoos a base de agua, incluyendo Giardia y Cryptosporidium.
FUNCIONAMIENTO
En su interior hay un gran número de fibras huecas como hilos muy finos. Cada fibra tiene poros en sus paredes con un diámetro de 0,2 micras o quinientas veces más pequeños que el diámetro de un cabello humano. Cuando el agua es forzada a alta presión a pasar a través de las fibras huecas estrechas, sólo el agua limpia cabe o pasa a través de estos poros, bloqueando el paso a bacterias, parásitos y suciedad. Al ser un método puramente físico no contiene ningún producto químico. El agua limpia sale a través de pequeños poros en las paredes de las fibras huecas y el agua ya filtrada es segura para beber.
Fuente: Iwanna Green
Fuente: Iwanna Green
Pueden conseguirse en Amazon con un precio que oscila entre los 19 y los 46 USD.
LOS DIFERENTES PRODUCTOS LIFESTRAW HACEN COSAS DIFERENTES
Las últimas versiones de LifeStrew son capaces de eliminar compuestos químicos y metales disueltos. Incorporan un proceso de filtración de dos etapas, además de la membrana de fibra hueca, tienen una cápsula de carbono que absorbe productos químicos como cloro y pesticidas. Los filtros de carbono más avanzados como el LifeStraw Flex también reducen los metales pesados como el plomo.
LifeStraw Family es un producto más autónomo parecido a LifeStraw que puede filtrar hasta 18.000 litros de agua (suficiente para satisfacer las necesidades de una familia de 5 miembros durante tres años).
El portafolio de LifeStraw ha seguido evolucionando para incluir el purificador LifeStraw Community de alto volumen para entornos institucionales como escuelas y clínicas (presentado en 2013), la botella de agua recargable LifeStraw Go (2014) y LifeStraw Mission, una bolsa plegable de gran volumen ideal para campings, caminatas grupales y expediciones lanzadas en 2015.
Fuente: LifeStraw
RESPONSABILIDAD SOCIAL
Por cada producto LifeStraw que se vende, un niño en edad escolar que lo necesite, recibe agua potable durante todo un año escolar. Su programa Give Back ya está proporcionando agua potable a más de 1.000.000 de escolares en todo el mundo y asegura la sostenibilidad a través de una planificación integral, capacitación, educación y visitas de seguimiento trimestrales por un período de 5 años.
Hoy LifeStraw se utiliza en productos y proyectos de agua en más de 64 países de todo el mundo. Inspirado por el impacto positivo en la salud que LifeStraw puede tener, Vestergaard afirma que continuará innovando, presentando nuevos productos LifeStraw para satisfacer una variedad de necesidades e iniciando programas igualmente innovadores para llevarlos a las personas que más los necesitan.
El tráfico es una condición donde el flujo vehicular se ve saturado debido al exceso de demanda de las vías, produciendo incrementos en los tiempos de viaje y atascamientos. Este fenómeno se produce comúnmente en las horas pico y resulta frustrante para los conductores, ya que resulta en pérdidas de tiempo y consumo excesivo de combustible.
Sus consecuencias denotan en accidentes por perdida de la paciencia y calma del conductor, en violencia vial y perdida de combustible.
Muchas ciudades en el mundo sufren de congestionamiento vial pero cuentan con un lago, río o costa marítima cercana. SeaBubble no es un barco, ni un avión, tampoco un carro, pero llega al rescate. Es un taxi eléctrico acuático cero emisiones que le permitirá a los usuarios dejar el tráfico de lado y navegar hasta su destino.
Este vehículo fue desarrollado por la empresa francesa SeaBubbles y se caracteriza por ser silencioso, no emitir emisiones contaminantes y deslizarse sobre el agua sin generar olas. Los prototipos han sido probados con éxito en un lago en Ginebra y en el río Sena en París. Por ello, no sorprende que el lema de SeaBubbles sea "Hagamos que nuestras ciudades fluyan de nuevo".
Así pues, SeaBubble o burbuja de mar busca nuevas formas y modos de desplazarse por la ciudad de modo más rápido y sostenible.
CARACTERÍSTICAS
Capacidad: diseñado para 5 personas: cuatro pasajeros y un piloto
Eléctrico: se propulsa a través de dos motores eléctricos que van con baterías de litio recargables en los puertos alimentado por energía limpia
Fácil de usar: el vehículo está a medio camino entre un bote y un carro
Ligero y fuerte: Construido con componentes ligeros de fibra de vidrio y espuma de alta densidad
Bajo consumo de energía: al elevar la cabina unos pocos pies, maximiza la eficiencia energética
Vuela: Las dos hélices sumergidas empujan el casco hacia arriba, unos 50 cm sobre el agua al alcanzar los 12 km/h, haciendo que parezca que vuela sobre el agua
Sin olas: el viaje es sorprendentemente relajante, sin movimientos bruscos que provoquen mareos, especialmente pensado para los que busquen visitar la ciudad desde un punto de vista distinto
¿CÓMO FUNCIONA?
El SeaBubble al ser 100% eléctrico, es autónomo durante sus recorridos y se carga mientras está estacionado en el muelle. Las personas pueden entrar desde la puerta lateral y tomar sus asientos en el vehículo. Una vez que las puertas estén cerradas y el vehículo asegurada, saldrá del muelle y comenzará a moverse.
Cuando llega a 12 km/h, volará por encima del agua, evitando cualquier mareo, movimientos sutiles u olas. Una vez que el recorrido ha terminado, el vehículo vuelve lentamente al nivel del agua para llegar al muelle, dejando salir a los pasajeros y esperando hasta que los siguientes estén listos para abordar.
PUESTA EN MARCHA
Si la ciudad de París lo aprueba definitivamente, para septiembre de este año, los SeaBubbles podrían estar en uso y disponibles como taxis fluviales para cruzar la ciudad en menos de 15 minutos y por menos de 10 euros (unos 12 USD).
Según el fabricante, abandonar las carreteras y tomar una ruta marítima podría reducir a la mitad los viajes diarios al trabajo en algunas ciudades. Por ejemplo, la compañía estima que ir desde la Marina de Dubai al centro de Dubai llevaría 43 minutos en auto, pero sólo 26 minutos en un Bubble.
Para proveer una experiencia transparente al usuario, los creadores de este vehículo crearon un ecosistema que incluye el vehículo, el muelle y una aplicación (para reservar un SeaBubble). Todos trabajan juntos para ofrecer la mejor experiencia de transporte de su clase.
Fuente: SeaBubbles
La compañía espera lanzar su vehículo en 50 ciudades en los próximos cinco años.
MODELOS EN INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO
Los modelos de taxis son solo la primera parte del plan de SeaBubbles, con un modelo autónomo con vencimiento a fines de 2019, así como versiones más grandes que incluyen el Bubble Jet, el Bus Wave Piercer y el Bus Foil.
Actualmente hay cinco prototipos de SeaBubble en el mundo. Los directivos de la empresa afirman que ya están tomando pedidos por adelantado, y que los primeros 20 van a organizaciones como hoteles y algunas empresas no especificadas, así como a particulares. Un prototipo de SeaBubble Taxi cuesta 140.000 euros (aprox. 162.000 USD).
Olio, es una aplicación de intercambio y/o redistribuciónde alimentos hiperlocal, es decir, conecta a los vecinos entre sí y con las tiendas locales para que los excedentes de alimentos puedan compartirse y no tirarlos a la basura.
Tirar la comida a la basura por cualquier razón, es un gesto cotidiano pero nada inofensivo. La suma de todas esas pequeñas porciones convierte a los hogares en los responsables del 50% del desperdicio de comida en el mundo desarrollado, convirtiéndose en uno de los mayores problemas que enfrenta la humanidad hoy en día. Una realidad contra la que se han propuesto luchar los creadores de esta app.
¿CÓMO FUNCIONA?
El funcionamiento de la plataforma es sencillo: el usuario sube una foto de un alimento en buen estado que no se va a comer, y el que primero lo solicite puede pasar a recogerlo. Los intercambios son gratuitos y suceden en la puerta de casa, lo que fomenta la relación entre vecinos en una época en la que cruzar el umbral para pedir una taza de azúcar se ha convertido en una rareza. De esta manera, se evita que la comida en buenas condiciones sea tirada a la basura.
Sus inicios fueron en el Reino Unido, donde comenzaron con una aplicación y un sitio web basados en la ubicación de los usuarios, lo que le permite listar y publicar una foto de alimentos no deseados para compartirlos con otras personas en el mismo vecindario.
Olio también ayuda a las empresas a luchar contra este problema. Para ellas tienen un “Programa de Héroes de los Residuos de Alimentos“, que permite a las empresas, como también a los minoristas y demás interesados, usar la plataforma y la comunidad de Olio para convertirse en organizaciones con “cero residuos de alimentos”.
Esto hace que las empresas paguen una cuota y a cambio Olio enviará a sus miles de voluntarios, para que vayan a sus tiendas o puntos de venta y recojan alimentos no deseados. Los voluntarios luego fotografían y listan los artículos en la aplicación y se ofrecen puntos de recogida locales. La mayoría de los artículos están disponibles para ser compartidos y recogidos/distribuidos en sólo unas pocas horas. Los voluntarios también pueden quedarse con hasta el 10 % de los alimentos que recogen.
HECHOS
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que 1/3 de toda la comida producida en el mundo se desperdicia, que un área más grande que China se usa para cultivar alimentos que nunca se consumen y que si el desperdicio de alimentos fuera un país, éste sería el tercer mayor emisor de gases de efecto invernadero (después de China y EE. UU.).
El desperdicio de alimentos es una ineficiencia masiva del mercado, del tipo de los que no persiste en otras industrias. Además, es moralmente incorrecto ya que 800 millones de personas se van a la cama con hambre todas las noches. Eso indica que 1 de 9 personas en el planeta está hambrienta o desnutrida. Todos y cada uno de ellos podrían alimentarse lo suficiente con menos de una cuarta parte de la comida que se desperdicia en los EE. UU., El Reino Unido y Europa cada año. Por otra parte, es una situación ambientalmente catastrófica, puesto que se necesita una masa de tierra más grande que China para cultivar la comida cada año que finalmente no se come: tierra que ha sido deforestada, especies que se han extinguido, poblaciones indígenas que han sido trasladadas, suelo que ha sido degradado, todo para producir comida que luego desechamos. Además, los alimentos que nunca se consumen representan el 25% del consumo total de agua dulce en todo el mundo.
Fuente: Olio
OBJETIVOS
Actualmente, la aplicación cuenta con más de medio millón de usuarios. Pero sus objetivos son muy ambiciosos ya que quieren multiplicarlos por 10 para 2025, pero la escala del problema que buscan atajar es gigantesca en comparación.
Las islas de plástico en los océanos del mundo son un problema de contaminación provocada por la actividad humana que pone en peligro los ecosistemas, la salud y la economía, pues dificulta la navegación. Se han desarrollado numerosas ideas para intentar recoger estos desechos plásticos y limpiar el mar utilizando para ello barcos y redes, pero estas islas se extienden a lo largo de millones de kilómetros cuadrados y viajan en todas las direcciones por lo que llevaría miles de años y miles de millones de dólares completar esta tarea.
Sin embargo, un innovador proyecto pretende acabar con este impedimento y contribuir significativamente a limpiar los océanos de los desechos plásticos. Boyan Slat, un joven holandés estudiante de Ingeniería Aeronáutica, es el autor de este proyecto denominado The Ocean Cleanup (TOC) que planea beneficiar no solo al medio marino sino a toda la humanidad.
EL PROBLEMA: LAS ISLAS DE PLÁSTICO
La basura se acumula en 5 zonas, parches o islas de basura en el océano, el más grande es la gran isla de basura del Pacífico o Great Pacific Garbage Patch, ubicado entre Hawaii y California. Los científicos de The Ocean Cleanup Foundation han llevado a cabo el análisis más exhaustivo de esta área, estimando que 1.8 trillones de piezas de plástico flotan en la superficie de esta isla de basura.
Las corrientes oceánicas concentran el plástico en estas 5 áreas debido a los giros subtropicales, que crean un vórtice en el mar. Una vez en estas islas, el plástico no desaparecerá por sí solo.
Fuente: TOC
LA SOLUCIÓN: UTILIZAR LAS CORRIENTES OCEÁNICAS COMO UNA VENTAJA
La solución a este problema requiere una combinación de cerrar la fuente emisora y limpiar lo que ya se ha acumulado en el océano. Para contribuir con la segunda parte de esta solución, TOC está desarrollando un sistema pasivo, utilizando las fuerzas oceánicas naturales para atrapar y concentrar el plástico.
¿CÓMO FUNCIONA TOC?
El principio detrás de esta solución es simple: crear una barrera, concentrar el plástico y sacarlo. En lugar de redes, el sistema TOC consiste de una línea de flotadores de 600 metros de largo y una pantalla de 3 metros de profundidad unida a los flotadores por su parte inferior.
Fuente: TOC
El flotador provee flotabilidad al sistema e impide que el plástico pase sobre él, mientras que la pantalla previene que las partículas pequeñas se escapen por debajo. Al no ser una red, la pantalla crea un flujo descendente, permitiendo a la vida marina pasar por debajo de ella con seguridad. De esta manera se evita que queden atrapados organismos de la vida marina, es decir, previene la peligrosa captura incidental que cada año se cobra la vida de miles de organismos marinos.
El sistema captura el plástico de la siguiente manera: toma ventaja de las 3 fuerzas naturales del océano: viento, olas y corrientes. Tanto el plástico como el sistema son llevados por la corriente. Sin embargo, el viento y las olas solo impulsan el sistema, ya que el flotador se pega parcialmente sobre la superficie mientras que el plástico está justo debajo de ella. Así, el sistema se mueve más rápido que el plástico, permitiendo ser capturado.
La pantalla se extiende más profundo en el medio del sistema que en los extremos. Esto permite que la corriente aplique más presión sobre el centro y el sistema adopte una forma de U, la cual le permite concentrar el plástico en su centro, como un embudo. El arrastre generado por la pantalla también actúa como una fuerza estabilizadora permitiendo al sistema reorientarse cuando el viento cambia de dirección. Y ya que el sistema, como el plástico, está flotando, él automáticamente fluye hacia las áreas con mayor concentración de plástico.
Fuente: TOC
Equipado con luces cargadas con energía solar, sistemas anti-colisión, cámaras, sensores y antenas satelitales, el sistema comunica activamente su posición en todo momento y reúne datos de su rendimiento.
Periódicamente, por ejemplo cada 45 días, una nave de soporte llega para recoger el plástico concentrado como si fuese un camión de basura oceánico. Según lo planificado, podrían recogerse de una vez hasta 3000 metros cúbicos de plástico. El plástico es entonces transportado a tierra, reciclado y convertido en productos duraderos.
Pero el proyecto va algo más allá, pues en el caso de los plásticos más voluminosos, que pudieran entorpecer un poco el proceso, una cinta transportadora los trasladaría hacia una trituradora, todo ello alimentado por paneles solares.
RECICLAJE
Paralelamente a la tecnología en desarrollo para extraer plástico del océano, también TOC Fundation investigó cómo reutilizar el material una vez que está de vuelta en la costa. El trabajo inicial en el reciclaje de plásticos oceánicos muestra que ese material puede convertirse en productos de alta calidad, tales como teléfonos, sillas, parachoques de automóvil o lentes de sol, todos hechos de plástico recuperado de la gran isla de basura del Pacifico. Al vender ese material de marca para su reutilización, el objetivo es lograr que la limpieza sea autosostenible.
Fuente: TOC
LIMITACIONES DEL PROYECTO
Una limitación sería la incapacidad de recoger partículas plásticas pequeñas (menores de 0,01 mm de diámetro), que tienden a distribuirse a grandes profundidades y contaminar el océano entero, incluyendo el Ártico. Sin embargo, muchas de estas pequeñas partículas son producto de la descomposición de trozos más grandes de plástico, así que inevitablemente, a medida que se recojan los grandes trozos, se reducirá paulatinamente el número de partículas microscópicas presentes en el océano.
OBJETIVOS
El 8 de septiembre de 2018 se lanzará el primer sistema de limpieza en la gran isla de basura del Pacifico. Para el año 2020, se espera alcanzar la implantación completa en esta isla de basura agregando de forma gradual más y más sistemas.
Se estima que con la implementación de TOC a gran escala (una flota estimada de 60 sistemas), se limpiará el 50% de la gran isla de basura del Pacífico en 5 años. La combinación de la limpieza (implementando la flota en cada giro oceánico), con la reducción de la fuente en tierra allana el camino hacia un océano libre de plástico para 2050.